viernes, 24 de octubre de 2014

Ciclo Tim Burton: Eduardo Manostijeras (1990)







Siguiendo con el ciclo de Tim Burton hoy es el turno de Eduardo Manostijeras. Eduardo Manostijeras tiene el honor de pertenecer a un selecto club de películas que, a pesar de lo mucho que me gustan, no soy capaz de ver muy a menudo porque acabo llorando como una magdalena cada vez que las veo. Prefiero no entrar en detalles de cómo acabe tras verla hace un par de días pero seguro que a los que os toca la fibra sensible esta película os haréis una idea.

Es Navidad, nieva y una niña le pregunta a su abuela cual es la razón de que nieve. La abuela le cuenta entonces la historia de Eduardo Manostijeras (Johnny Depp) un muchacho creado por un inventor (Vincent Price) cuyas manos eran cuchillas.


Eduardo Manostijeras es una película clave en la filmografía de Tim Burton por muchos motivos. En general, es considerada como una de las mejores cintas del director (no podría estar más de acuerdo) y la verdad es que esta es una de sus películas más redondas e icónicas. En Eduardo Manostijeras, Tim Burton consigue crear un personaje distinto, reconocible y recordado y todo ello a pesar de no ser totalmente innovador ya que Eduardo no deja de ser una reinterpretación de la figura de Frankenstein. También es una de las películas que más nos acercan a Tim Burton de una manera absolutamente personal y es que en ella el director nos demuestra su amor por el cine de terror, hecho que queda de manifiesto al darle  un papel muy significativo (por ser el papel quien es y por lo que sugiere) a uno de sus actores favoritos, Vincent Price.  En entradas posteriores volveremos a hablar de  este amor por el cine de terror  ya que va a ser una constante en la filmografía del director como vemos en Ed Wood, Mars Attacks o Frankenweenie.

Otro aspecto clave de Eduardo Manostijeras fue la elección de Johnny Depp para el papel de Eduardo. Esta fue la primera vez que Johnny Depp y Tim Burton trabajaban juntos y, a la vista está, que la relación no ha podido ser más provechosa para ambos, principalmente para Johnny Deep porque Eduardo Manostijeras fue uno de los primeros papeles importantes del actor y en  esta película ya vimos la facilidad de Depp para dar vida a personajes un tanto desequilibrados y con una caracterización muy trabajada. También fue muy importante a otros niveles porque gracias a esta película conoció a Winona Ryder, quien pasó de ser el amor de Eduardo en la película a ser el del propio Depp en la vida real. Reconozco que a mí esta pareja me encantaba y me dio bastante pena cuando rompieron porque me parecían tal para cual pero más lo tuvo que sentir Johnny Depp por haber tenido la genial ocurrencia de tatuarse “Winona Forever” en un brazo.  Por si os preguntáis que hizo el bueno de Depp con ese tatuaje, a día de hoy lo sigue teniendo, pero modificado, ya que ahora es “wino forever” (borracho para siempre).

Siempre he creído que Eduardo Manostijeras ha tenido (y tiene) tanto éxito porque su historia nos remite a un cuento de la infancia pero modernizado con el típico tono siniestro de Tim Burton. Además, al igual que pasaba con los cuentos, de la película de Tim Burton también extraemos una enseñanza: que la intolerancia y el miedo hacia los que no son como nosotros pueden hacer que nos perdamos la posibilidad de conocer a alguien realmente especial. Tim Burton, por añadidura, nos invita a reflexionar sobre nosotros como sociedad, sobre cómo acogemos a los que son distintos y sobre cómo pretendemos imponernos a los que son más débiles.  Pero, sobre todo, Tim Burton parte de “el hombre es un lobo para el hombre” y llega a “la sociedad es un lobo para el hombre” porque, mientras vivía solo en la mansión de su creador, Eduardo era un ser cándido y bondadoso ajeno a cualquier sentimiento negativo pero una vez empieza a vivir en sociedad, descubre la maldad, el odio y las pasiones más bajas. La conclusión es clara: no estamos preparados para tener a alguien como Eduardo Manostijeras viviendo entre nosotros.

Esta es una de mis películas favoritas de Tim Burton desde siempre. El personaje de Eduardo y todo lo relacionado con él (su origen, el castillo, sus creaciones, su historia de amor con Kim…), la banda sonora de Danny Elfman, la imaginación de Tim Burton o el reparto (además de los ya nombrados, Dianne Wiest y Alan Arkin están de maravilla), todo en Eduardo Manostijeras funciona de maravilla y consigue que está película sea mágica. En mi ranking particular de películas de Tim Burton ocupa, con muy poca diferencia con respecto a la película que está por encima de ella, el puesto número 2.

4 comentarios:

  1. Para mi es una obra maestra, una película que transmite tanto, lo tiene que ser. Gran entrada. En mi ranking personal también es la numero 2, sólo superada por Ed Wood.

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  2. Exactamente, es puro sentimiento y una de las primeras maravillas que pudimos ver en los 90.

    Yo podría ponerla en el número 1 perfectamente pero la que ocupa esa posición la supera en una sola cosa que ya desvelaré en su correspondiente entrada. En cualquier caso, es un gran película cuya crítica social sigue estando intacta casi 25 años después

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  3. Aisss me has dejado encantada con tu entrada! Eduardo Manostijeras es mágica como dices.Demuestra como el ser humano rechaza a aquellos que son diferentes. Es adorable el personaje.

    Enhorabuena de verdad por tu entrada compañera!

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  4. Muchas gracias, Ana, me alegra que te haya gustado tanto porque he puesto todo el corazón en ella.

    Un abrazo

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